¿Puede un barco de 5.000 toneladas considerarse un torpedero?
Sí, siempre que lleve ocho tubos lanzatorpedos y sea concebida para destruir a otros torpederos.
En nuestro episodio «Torpedeando, que es gerundio» narramos la fulminante y enconada batalla naval entre cuatro poderosas lanchas torpederas británicas contra un inmenso «cazador de torpederos» italiano, un barco anómalo.
Lo de anómalo no es peyorativo, al contrario. El Scipione Africano era un prodigio de la construcción naval, con innovaciones que luego se volvieron comunes, pero que en los tiempos de la Segunda Guerra Mundial parecían Ciencia Ficción. Entre sus prestaciones estaba la velocidad: 43 nudos en configuración de combate, rapidez inusitada para un barco tan grande.
Encontraréis sus detalles técnicos y la narración detallada de la batalla en nuestro episodio, disponible para su escucha y/o descarga gratuita AQUÍ. ¿Quién ganó? ¿Italia o Gran Bretaña? ¿Hundieron las cuatro lanchas torpederas al Scipione Africano? La respuesta en el episodio.
A continuación fotos de los contendientes:
Las cuatro lanchas británicas que se enfrentaron al Scipione Africano provenían de la fábrica norteamericana Electric Launch Company y eran del modelo Elco 77:
El Scipione Africano, pertenecía a la clase Capitani Romani. Solo fueron entregados tres de los doce proyectados debido a las limitaciones de la guerra.

El Scipione Africano era un «cacciatorpediniere» o sea, un «cazador de torpederos»