Como recordaréis, en nuestro noveno episodio regular hablamos sobre el buceo en pecios. En el video de esta entrada, podemos ver la gran sorpresa vivida por un grupo de buceadores de la empresa DCN Diving mientras realizaba reconocimiento y búsqueda de cadáveres dentro de un remolcador hundido a 30 metros de profundidad.
El Jascon-4 se hundió el 26 de mayo de 2013 mientras asistía a un buque abarloado a una plataforma petrolífera en la costa nigeriana.
Como podréis ver en el documento gráfico, cuando los submarinistas encontraron lo que creían era otro cadaver, de pronto, ¡Se movió!.
Harrison Okene, el cocinero, logró sobrevivir 62 horas dentro de una burbuja de aire en un baño situado a proa del buque. Se mantuvo vivo gracias latas de refresco y a una gran fuerza de voluntad a pesar de la oscuridad, del fío y de estar constantemente mojado y asustado.
Los buzos, después de calmarlo y colocarle un arnés y una mascarilla, lo llevaron a una campana presurizada en la que estuvo dos días y medio en descompresión.
El afortunado marinero nigeriano fue el único superviviente entre 12 tripulantes.